Todos los miembros del movimiento Paz y Bien nos reunimos para celebrar a nuestra Madre María, y en la celebración recibimos los símbolos que nos acreditan como miembros activos del movimiento.

Al recibir cada símbolo sabíamos que debemos sentir a Paz y Bien como algo nuestro. Debemos sentirnos comprometidos a crecer en el amor a Jesucristo y a María, ser signo de paz y de bien en nuestro ambiente, proclamando con nuestras vidas que es posible vivir los valores de Jesús, los valores del Reino en la casa, en el colegio y con los amigos.

Nos congregó un acontecimiento muy especial: la fiesta de la Madre, Santa María de Paz y Bien. Ella, modelo de seguimiento a Jesús, nos atrae hacia él y nos invita a ser sus seguidores, testigos y forjadores de una nueva humanidad que tiene como proyecto e ideal llegar a ser como Jesús.

Madre, Santa María de Paz y Bien, aquí nos tienes, somos tus hijos más queridos, haz que seamos instrumentos de paz como lo fuiste tú y que manifestemos con nuestras personas el amor que le tenemos a tu Hijo.